Una cariñosa carta de Ramón Moreno González al Albéniz

Carta a una amiga:
Gracias por el mail Eva,
ya sabes que el albéniz ha sido siempre mi segunda casa en madrid, si no la
primera.
La muerte de TERESA VICO, que era mi madre madrileña, fue una de las penas
mayores que he sentido. Ahora la caida anunciada del albéniz, el teatro más
humano que he pisado jamás, se transforma en un insulto a la memoria, una
falta de respeto a la historia y un desprecio a la cultura.
Solo puedo sentir rabia y asco.
El personal del albéniz, es el motor que ha hecho posible cada montaje, cada
fantasía, y que en cada uno de los rincones del teatro se respirara una
suave sensación a hogar. A ellos tambien les roban la historia y solo nos
queda esperar que no el trabajo, que es su forma de vida y el pan que se
llevan a la boca.
En cualquier caso, nunca se podrá comprar o vender todo aquello que sucedía
en el albéniz y que lo transformaba mágicamente de teatro en casa y de casa
en cajita de sueños.
Cuando pase por alli, hayan contruido lo que sea, recordaré siempre que
desde aquel preciso lugar, sobre un hermoso escenario, un día, yo
redescubría en la noche madrileña, un cielo iluminado de madrid.

Ramón Moreno González