Nuestro pasacalles: "Si es por lo del Albéniz, entonces sí firmo"

El viernes pasado organizamos, como ya sabéis el Pasacalles por el Albéniz, de manera improvisada, sin saber realmente con qué gente contábamos por la difícil fecha, por ser el viernes antes de las vacaciones de mucha gente, por ser un día en que muchos profesionales trabajan,por la cercana fiesta del Orgullo Gay y por otra reivindicación del colectivo de transexuales.

Teníamos muchas cosas en contra, pero quisimos salir a recordar a la gente el problema del teatro y ahí estuvimos. Nos reunimos delante del Albéniz como habíamos quedado y sacamos fuerzas para meternos dentro de la masa de gente en la Puerta del Sol.




Llevamos carteles con nuestro YO AMO AL ALBÉNIZ, lanzamos confeti y gritamos "Este teatro lo vamos a salvar" y "El Albéniz es de todos". Los de Esquivel bailaron en la Puerta del Sol y luego nos invitaron a sumarnos. La gente que por allí pasaba se arremolinó en torno a nosotros. Miraban con curiosidad y David, Alejandro, Rocío, Jimena y Abraham no pararon de recoger firmas en todo el trayecto.

Muchos de los curiosos que miraban el espectáculo no conocían el problema del Albéniz
y cuando se lo contábamos se quedaban sorprendidos "pero cómo, ¿que van a cerrar un teatro?" y firmaban en contra. Otros al principio nos miraban recelosos, porque pensaban que éramos de alguna organización e incluso se apartaban, pero al decirles que era por el Albéniz, volvían y decían "ah,si es por lo del Albéniz, entonces sí".
Fue muy gratificante ver esa sonrisa dulce que nos devolvía la gente.

Lo más importante de todo (independientemente del blog, del pasacalles, de las manifestaciones que gusten más o menos a unos u a otros con gente con la que se identifiquen o no, de nuestra organización) es el hecho de dar a conocer el problema del Albéniz.


Que el teatro no está salvado.

Lo más importante es que cada uno sepa que puede decir que no está de acuerdo con algo, tan sencillo como eso.

Es simplemente oponerse. No cuesta mucho decir que algo te parece mal.

Para que los de siempre, lo que tienen la sartén por el mango, al menos lo sepan.

Habrá gente que aplauda los nuevos proyectos,con las fanfarrias, las promesas, pero habrá mucha otra que no lo haga.


Que no habrá algo nuevo en el lugar, sino algo antiguo destruído.

Si destruyen el teatro, cosa que no queremos que ocurra, al menos, habrá mucha gente mirando, cuando antes no la había porque lo desconocían.




Lo mejor de estos casi dos meses que llevamos, es el hecho de que antes nadie sabía nada de que el Albéniz lo habían vendido sin consultar a los ciudadanos y ahora lo saben casi 6000 personas, 6000 personas que dicen que no están de acuerdo.

Sigamos diciendo que no estamos de acuerdo.
Berta Delgado.