Teatro Albéniz: acabo de descubrir que tienes mi edad. En realidad 3 meses menos que yo, puesto que nací en diciembre de 1944 y a ti te inauguraron en marzo de 1945. Tengo recuerdos de mi infancia de acudir ti y a otros compañeros tuyos: Alcázar, Calderón, Fuencarral, Comedia, etc., y a alguno ya tristemente desaparecido como el Fontalva ¡quién se acuerda ya de él!, a ver representaciones de teatro infantil y de vuestra cálida acogida. En vuestras salas empecé a amar el teatro y a sentir la inenarrable emoción de ver levantarse el telón.
Pero de ti tengo especiales recuerdos. Aún recuerdo un título de aquellas maravillosas representaciones para niños: "El gato con notas", sí, no me equivoco, "con notas", porque se trataba de un musical, y todavía puedo ver a la intérprete principal vestida de gato, con un enorme rabo, moviéndose por el escenario y cantando "miau, miau, marramiau, miau, todo lo has comido y no me has dejao", que luego yo repetía en mi casa (no sé si habrá constancia de ella en tus archivos).
En tu sala experimenté una de las alegrías más grandes de mi infancia que comprenderán sobre todo las mujeres de mi generación. En el descanso de aquellas representaciones sorteaban juguetes, y en una ellas tuve la enorme fortuna de que me tocara el "premio gordo": una maravillosa Mariquita Pérez con pelo de verdad en su caja de rayas rojas y blancas. Por cierto, mi número del sorteo era el 65.
Puedes imaginarte que he vuelto muchas veces a visitarte, cuando fuiste cine (Cinerama, La conquista del Oeste, La vuelta al mundo en 80 días, etc.), y después, cuando volviste a ser teatro, a todo tipo de espectáculo: música, danza, flamenco, teatro...
Por todo ello quiero que sigas vivo como yo. Te deseo mucha suerte y te garantizo que estaré a tu lado en lo que haga falta para que no te derriben.
Un abrazo, Mª Natividad García
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