Chester May

Lo he leído.
Indignación? En absoluto.
No puedo esperar una sorpresa de personas tan llamadas a destruir lo ajeno,
como lo propio, la cultura como sus propias familias.
Gentes de intereses materiales y consumistas a los que tan sólo espera un
final atroz y tan dolororso como la pretensión de trastocar la existencia de
la historia y de una parte de la cultura en ladrillo errante favorecedor de
bolsillos atrapador por la codicia monetaria y que ellos llaman "avanzar y
progresar en la vida para asegurar mi jubilación"...Jeje, el teatro Albéniz
no les consta como una obra de la Historia, como un compendio de la cultura
y del crecimiento expositivo y curricular de cientos, cientos, cientos de
personas. Sus inmediatos destructores son solo carnaza de la codicia, del
argumento comisionista y burlesco propio del Madrid decadente y
contraconservador.
Reciban unos besitos, sres. políticos y uds. burdos inmobiliaristas